Por villasombrero.com
Un alto funcionario del Pentágono confirma que EE.UU. apoya con total firmeza la modernización de flota del escuadrón de F-16 de Turquía.
“Estados Unidos apoya la modernización de la flota de combate de Turquía porque eso contribuye a la seguridad de la Organización del Tratado del Atlántico Norte [OTAN] (...) Las sólidas capacidades de defensa turcas contribuyen a una defensa sólida de la OTAN y, por tanto, a la seguridad estadounidense”, ha indicado este miércoles la secretaria adjunta para Defensa y Asuntos de Seguridad Internacionales del Departamento de Defensa estadounidense (el Pentágono), Celeste Wallander, en una entrevista con el medio local PBS.
Al respecto ha agregado que el proceso de venta debería pasar todavía por la burocracia habitual con este tipo de contratos, destacando que son planes que están en marcha.
Sus palabras se produjeron horas después de que el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, acordara levantar el veto a Finlandia y Suecia para adherirse a la OTAN._+
Eso mientras que, un funcionario de alto rango de la Casa Blanca negó la víspera que el país norteamericano hubiera ofrecido alguna recompensa a Turquía tras su decisión sobre la adhesión de los dos países bálticos a la Alianza Atlántica.
El pasado mes de mayo, Finlandia y Suecia solicitaron unirse a la OTAN, impulsados por el desarrollo del conflicto en Ucrania, que empezó el pasado 24 de febrero. El anuncio de los dos países nórdicos fue respaldado por todos los miembros de la Alianza, excepto Turquía.
Rusia denuncia el paso “desestabilizador”
Entre tanto, desde Rusia rechazan la expansión de la OTAN hacia el Este, en el marco del ingreso de estos dos Estados en el bloque militar occidental, encabezazdo por EE.UU., por considerarse un factor “desestabilizador”.
“Nuestra posición es conocida, no cambia, consideramos la ampliación de la Alianza Atlántica como un factor particularmente desestabilizador a nivel internacional”, ha dicho la misma jornada el vicecanciller de Rusia, Serguei Riabkov.
Con Finlandia, la frontera del bloque militar se acercará aún más al territorio ruso, casi 1400 kilómetros de línea común que afianza la posición de la Alianza en una zona próxima de gran interés económico y geoestratégico para Moscú, es decir, el Ártico. Por tanto, con fecha anterior, Moscú había advertido que la adhesión de Suecia y Finlandia a la OTAN se convertiría estos territorios en nuevos blancos del Ejército ruso.