Por villasombrero.com
Aunque la mayor parte del mundo se opone al embargo de EE.UU. contra Cuba, la postura de Washington se mantiene inmutable y ello genera reacciones sociales._+
La mayor parte de los concurrentes a un evento que se celebró en Miami tenían un mensaje de unidad, paz y hermandad. Otros, sin embargo, estaban cargados de odio, palabrotas y violencia. Han sido los dos polos del segmento inmigrante cubano en Estados Unidos: unos despiertan a la realidad de la injusticia del embargo contra Cuba, otros prefieren vivir en el pasado.
Recientemente 184 naciones manifestaron su rechazo a las políticas estadounidenses contra Cuba ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU). Se esperaría que la Administración Biden-Harris tome acción, pero hasta el momento no hay prioridad entre los demócratas. Mientras, al contrario, los republicanos capitalizan del tema hasta el cansancio.
El mundo exige “Abajo con el bloqueo contra Cuba”. No obstante, a pesar de la casi unanimidad de las voces de la comunidad internacional lo cierto es que las medidas políticas y económicas de Estados Unidos contra la isla persisten.
Todo ello en detrimento, no solo del pueblo cubano, sino también de una cuantitativa comunidad inmigrante en Estados Unidos que ha decidido salir a las calles para hacer respetar sus derechos constitucionales y manifestar solidaridad con sus compatriotas.
Según la Cancillería de Cuba, las pérdidas económicas derivadas del bloqueo ascienden a 147 853 millones de dólares. Y luego está el tema humanitario, que se complica aún más con la vigencia de la pandemia de la COVID-19.
Marcelo Sánchez, Miami.