Por villasombrero.com
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, da un plazo de 72 horas a la embajadora de la Unión Europea (UE) para que abandone el país suramericano._+
“He decidido darle 72 horas a la embajadora de la Unión Europea (Isabel Brilhante Pedrosa) para que abandone nuestro país, y exigir respeto a la Unión Europea, ¡ya basta del colonialismo europeo contra Venezuela”, ha indicado el mandatario venezolano, Nicolás Maduro durante la entrega del Premio Nacional de Periodismo.
La decisión del Gobierno venezolano se da pocas horas después que la UE sancionara a once funcionarios venezolanos, entre ellos, la directiva de la Asamblea Nacional (AN), encabezada por el diputado disidente Luis Parra, por “negarse a cumplir órdenes de la embajada de la UE”, según declaraciones del jefe de Estado.
De acuerdo con Maduro, los funcionarios de la UE mantienen “una actitud arrogante y supremacista” hacia la nación venezolana, siguiendo los designios del presidente de EE.UU., Donald Trump.
“Qué vergüenza, 27 países, un continente de gran poder económico, militar, político, de rodillas ante Trump y sus políticas de agresión, reconociendo a un fantoche como (el líder opositor Juan) Guaidó”, ha reprochado Maduro.
Ha afirmado también que estas acciones coercitivas buscan asustar a los ciudadanos o partidos que desean postularse a los próximos comicios legislativos. “Dicen que quien se inscriba va a ser sancionado. Ay, qué terror, no vamos a poner dormir”, ha ironizado Maduro y pedido a la UE prepararse para ver “unas elecciones libres, transparentes, con la participación de miles de candidatos”.
A su vez, el canciller venezolano, Jorge Arreaza, ha rechazado y condenado las nuevas e “ilegales” sanciones de la UE y ha asegurado que estas medidas van en contra del diálogo por la paz de la nación suramericana. Asimismo, ha argumentado que Caracas se reserva el derecho de responder “contundentemente”.
El Consejo de la UE ha añadido a 11 funcionarios venezolanos a la lista de personas contra las que se adoptan medidas restrictivas debido a su presunto papel en los actos y decisiones que socavan la democracia y el Estado de derecho en Venezuela.
La Unión Europea ha impuesto sanciones contra Venezuela desde noviembre de 2017 e incluyen un embargo de armas, así como una prohibición de viajar y la congelación de activos de varios funcionarios venezolanos.