La Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) votó por abrumadora mayoría a favor de la incorporación de los palestinos, que consiguieron así un éxito diplomático al vencer las presiones en su contra de Estados Unidos e Israel.
De los 173 países que votaron, 107 lo hicieron a favor, 14 se opusieron y 52 se abstuvieron.
"Este voto eliminará una pequeña parte de la injusticia de la que es víctima el pueblo palestino", dijo al pleno de la UNESCO en París el ministro de Relaciones Exteriores de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Riyad al Malki.
Los líderes palestinos hablan ya de un día histórico. Ven la entrada en la UNESCO como parte de una más amplia estrategia de presión para conseguir el reconocimiento internacional a su aspiración de constituirse en Estado, y poner presión sobre Israel.
La UNESCO es la primera agencia de Naciones Unidas en la que los palestinos buscaron entrar desde que solicitaron al Consejo de Seguridad su reconocimiento como Estado, el pasado mes de septiembre.
En ese sentido, la votación crucial está prevista para noviembre, cuando el Consejo de Seguridad se pronunciará sobre la solicitud de las autoridades palestinas de ser reconocidos como Estado.
Presión diplomática
Washington ya ha adelantado que ejercerá su derecho de veto. Pero en la UNESCO, no tiene tal prerrogativa y no pudo impedir la entrada de los palestinos. Sin embargo, no fue algo ante lo que se quedaron de brazos cruzados.
"Como un asesor de la ANP comentó, fue un fracaso del poderío estadounidense y los palestinos consiguieron lo que querían"
Jon Donnison, BBC Jerusalén
Según Jon Donnison, de la BBC en Jersualén, Washington puso en marcha una ofensiva diplomática para tratar de evitar la entrada de los palestinos en el organismo.
"Hicieron presión para que los palestinos perdieran la votación. Pero como un asesor de la ANP comentó, fue un fracaso del poderío estadounidense y los palestinos consiguieron lo que querían", señaló Donnison.
Tras conocerse el resultado de la votación el embajador de EE.UU. ante el organismo, David T. Killion insistió en la idea de que su país "ha sido claro en la necesidad de una solución de dos Estados".
"Pero el único camino es a través de negociaciones, no hay atajos. Iniciativas como las de hoy son contraproducentes", dijo Killion.
No pareció pensar eso el plenario de la UNESCO, que recibió con un aplauso generalizado el resultado de la votación.
Desde la oficina de la BBC en París, David Chazan comenta que los palestinos está celebrando el resultado como una victoria moral y un paso adelante hacia la condición de Estado.
Y es que en la primera agencia que hacen un intento para adquirir la condición de miembro pleno fueron recibidos con un resultado tan favorable.
El apoyo de los árabes fue decisivo a la hora de conseguir pasar los dos tercios que necesitaban, pese a las gestiones de Washington por evitarlo.
En una sesión muy intensa, los países del BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) votaron a favor. También España.
Mientras entre los que se opusieron estuvieron EE.UU., Canadá y Alemania, entre otros. El Reino Unido se contó entre las abstenciones, junto a Colombia y México.
Al ser parte de la UNESCO, ahora los palestinos podrán hacer que sus monumentos sean candidatos a formar parte del "Patrimonio de la Humanidad".
Rechazo israelí
Por su parte, Israel reaccionó advirtiendo que la decisión de la UNESCO pone en peligro la paz en la región.
"Este voto eliminará una pequeña parte de la injusticia de la que es víctima el pueblo palestino"
Riyad al Malki, canciller de la ANP
"Israel lamenta la decisión de la Asamblea General de la UNESCO aceptando la membresía palestina en la organización", señala un comunicado del ministro de Exteriores, Avigdor Lieberman.
"Esta es una maniobra unilateral palestina que no llevará cambios al terreno más que mayores obstáculos para un acuerdo de paz", agrega el comunicado.
"Esta decisión no convertirá a la ANP en un estado real y pone problemas en el camino de retomar las negociaciones".
Poco antes de que se produjera la votación, Lieberman había advertido que su país consideraría "cortar todos los contactos con la ANP" si eran aceptados en la UNESCO.
Pero según Donnison, eso "parece complicado de llevar a cabo por parte de Israel".
"Se ha hablado en recientes semanas hasta de disolver la ANP por no haber conseguido avanzar en el proceso de negociación de la paz con Israel. Si eso pasara, el pueblo palestino en Cisjordania y Jerusalén oriental pasarían a ser responsabilidad de Israel, y no estoy seguro de que eso es algo que Tel Aviv quiera".
Y rechazo también en Washington
"La acción de hoy complicará nuestra capacidad para apoyar a la UNESCO"
David T. Killion, embajador de EE.UU. en la UNESCO
Una de las claves está en que, como señala Donnison, los palestinos "no creen que las conversaciones de paz estén llevando a ningún lado".
"Sienten que no tienen nada que perder. No han conseguido nada en dos décadas de negociaciones. Y sólo ven un camino para presionar a Israel, si las negociaciones llegan a retomarse".
De momento, la que parece será la primera consecuencia de la votación es que Washington debe dejar de aportar fondos a la UNESCO. Eso privará a la agencia del 20% de su presupuesto, unos US$70 millones.
La Casa Blanca podría verse obligada a retirar sus aportes a la agencia por una ley de los años 90 que llama a cortar la fianciación a cualquier organismo de Naciones Unidas que admita a los palestinos como miembros de pleno derecho.
"La acción de hoy complicará nuestra capacidad para apoyar a la UNESCO", dijo al respecto el embajador Killion.
"Esto tendría serias consecuencias, habría que cortar programas y todo el presupuesto tendría que ser rebalanceado"
Irina Bokova, UNESCO
Por su parte, la directora general del organismo, Irina Bokova, expresó su preocupación por la posible retirada de la financiación estadounidense.
"Esto tendría serias consecuencias, habría que cortar programas y todo el presupuesto tendría que ser rebalanceado", dijo Bokova al plenario tras la votación.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, dijo que es necesario "trabajar para encontrar soluciones prácticas de cara a garantizar las fuentes de financiación de la UNESCO".
No sería la primera vez que EE.UU. boicotea la Unesco. Ya lo hizo entre 1984 y 2003 por lo que el Departamento de Estado llamó "creciente disparidad entre la política exterior de EE.UU. y los objetivos de la UNESCO".
Sin embargo, el presidente Barack Obama considera el organismo de interés estratégico para su país y lo ve como una herramienta útil de política multilateral de difundir ciertos valores occidentales.