| 20 de Nov 2009 12:00 AM |
Por un requisito legal, los clientes de las empresas de distribución eléctrica que fueron detectados con conexiones ilegales siguen en la red, mientras se define su estado en la justicia. El superintendente de Electricidad, Francisco Méndez, y el procurador general adjunto para el Sistema Eléctrico (PGASE), Moisés A. Ferrer Landrón, explicaron que la Ley 186-07 establece que deben continuar en el sistema, salvo que haya una litis, en cuyo caso la distribuidora demandante debe esperar el resultado, a cargo del Ministerio Público para el sistema eléctrico. En el proceso de espera, el cliente sigue recibiendo su factura de manera normal. Aunque cada caso es diferente, este paso puede durar entre tres y seis meses aproximadamente. |
Datos ofrecidos por el área comercial de Edenorte indican que en los últimos seis meses han levantado junto a la PGASE 89 casos de robo de electricidad, de los cuales 31 fueron descubiertos en residencias, 44 en pequeños comercios y 14 pertenecen a zonas de los denominados grandes clientes, como cabañas, hoteles y centros de diversión.
Por esas irregularidades, Edenorte ha cobrado en la zona del Cibao ocho millones 717 mil pesos, en seis meses.
Por el sector residencial cobró un millón 208 mil pesos, y en el caso de los comercios, cuatro millones 260 mil pesos.
Estos casos, como los dados a conocer el pasado miércoles por la SIE, han utilizado el método robo de luz borrando la lectura, manipulando el medidor de manera subregistrado.
Consiste en la conexión por línea directa empostrada desde la base del medidor, también por conexión directa, y manipulación de medidor retroalimentando desde dentro de la vivienda.
Asimismo, en el caso de los negocios, han detectado que se utiliza la técnica de manipular potencia apagando y encendiendo el medidor después de las seis y retroalimentando el medidor desde dentro del establecimiento vinculado al NIC, (número de usuario).
En tanto, la empresa distribuidora Edesur dominicana a la fecha ha revelado más de 165 casos de fraude a la PGASE.
Lorenzo Ventura, administrador de Edesur, dijo que de ese universo, 25 ya tienen medidas de coerción.
La PGASE dijo que dará a conocer periódicamente las empresas distribuidoras y los nombres de las personas físicas y morales a las cuales se les comprueben fraudes eléctricos.
Duras medidas aplicadas
La Ley 186-07 sanciona por la vía penal los actos de fraude eléctrico, con prisión de tres días hasta tres años y la aplicación de multas, según la energía sustraída indebidamente.
Por igual impone garantía económica de RD$10 mil y orden de arresto e impedimento de salida.
En cuanto al proceso de desarrollo, la distribuidora es la responsable de hacer la denuncia a la PGASE, que acude a levantar las evidencias.
Moisés Ferrer Landrón, procurador general adjunto para la PGASE, explicó que trabajan paso a paso: se presentan al lugar con técnicos de la SIE, toman fotos, hacen la experticia para determinar si hay algún tipo de fraude de los que contempla la ley.
Si el robo es en medido, la ley contra el fraude eléctrico dispone que debe ser retirado, trasladar a los laboratorios de Digenor y colocar otro.
Asimismo, la ley indica que el cliente o usuario no debe quedarse sin energía hasta tanto se determine que ese medidor ha sido manipulado.
Irregularidad confirmada y verificada
En la lista publicada por la SIE en su página web se observa que los usuarios detectados con irregularidades son de grandes residencias, comercios, colmados y cabañas.
Hasta ahora, las distribuidoras de electricidad no han iniciado el proceso en barrios minoritarios.
Entre los casos comprobados se encuentra Restaurante Patoruzù, en el sector Los Prados, cuyo fraude por alteración del medidor fue tasado en 181 mil pesos; Luis Alberto Tejada, residente en la calle Las Colinas, Viejo Arroyo Hondo, contra el cual fue dictada orden de arresto e impedimento de salida.
Mientras Alexis Brioso Matos, de Repostería Vinicio de la avenida, Isabel Aguiar, en Herrera, le fue solicitada, medida de coerción ante los tribunales, y a Ramón Rodríguez, de la empresa Pollo Rodríguez, de la calle 6 esquina Estrella Sadhalá en Santiago
