Falleció en la madrugada de ayer el señor Manuel Antonio Báez (Manuel Lico).
SOCIEDAD PROGRESISTA DE VILLA SOMBRERO (SOPROVIS)
BIOGRAFIA DE MANUEL ANTONIO BÁEZ CALDERÓN (Manuel Lico)
Nació el día 17 de febrero del año 1923 en la comunidad de Villa Sombrero, Baní. Segundo hijo de los esposos, Manuel Ramón Báez y Juliana Maria Calderón.
En su niñez podemos decir que fue un niño muy inquieto y carpetoso. Desde muy temprana edad tuvo que trabajar para ayudar a sus padres en la quema de carbón, además fue vendedor de carbón en el pueblo de Baní, venta que la realizaba en un burro todos los días.
Lamentó mucho que no poder realizar ningún tipo de estudio, debido principalmente a que tuvo que trabajar desde niño, para ayudar a sus padres, los cuales eran muy pobres, pero muy trabajadores.
Por problemas sociales de aquella época como es bien sabido a los carboneros se les marginaba y se le menospreciaba al igual que a los negros, en la sociedad. Y como persona inquieta, fue buscando otro tipo de trabajo que realizar y así fue como empezó a trabajar la agricultura, realizando un jornal de trabajo o echando días como es más común en el campo, así empezó ganando diario un jornal de 25 centavos por día en las tierras de Octavio Pimentel y los Gabrieles entre otros propietarios de tierra.
Luego siguió su búsqueda de trabajo más rentable y empezó a trabajar la tierra no como jornalero sino como medianero o sea trabajar a media tierra. El empezó a realizar trabajos como, agricultor en las tierras de Joselito Arias en compañía de su abuelo el señor Domingo Calderón, cuando a penas contaba con 14 años de edad. Años después fue reconocido como un agricultor pobre pero muy laborioso y logro independizarse de su abuelo en los trabajos agrícolas. Entre los propietarios de tierra que el trabajó podemos citar a Pomo Mejía Pimentel, Luis Troncoso entre otros. A los 22 años de edad el 9 de noviembre del año 1945 contrajo matrimonio con la Señora Grecia Aurora Troncoso, hija de un agricultor acomodado de su época, con la cual procreó una familia compuesta por 8 hijos maternos más 3 de crianza.
Sus hijos son: Manuel Altagracia, Diomaris Amparo, Milcio Euclides, Leonidas Radhames, Ramón Omedis (Pepe), Luis Lloneit (Nena), Fiordaliza Maria y Mirelis Concepción Báez; Hijos de crianza Silfido Bienvenido Troncoso, Maria de Regla Pimentel y China Casado.
Como padre fue ejemplar, dando prueba de hombre con una disciplina rígida, apegada a la moral, al respeto a la honradez y el amor hacia los demás.
Luego de agotar una gran temporada como agricultor, paso a aserrador con el señor Gundo Díaz; más luego fue ayudante de carpintería y albañilería, trabajos estos que los hacía con el maestro Niño Mejia, pero muy pronto se convirtió en albañil gracias a su interés y disciplina al trabajo, como albañil realizó un gran trabajo tanto en Sombrero como en comunidades aledañas.
Su gran especialidad eran los trabajos en el cementerio, podemos decir que más del 70% de los trabajos realizados en el cementerio de Sombrero fueron realizados por él, además trabajó en los cementerios de Baní, Bocacanasta, Cañafistol, Matanzas, Sabana Buey, Fundación y otros.
Para el año 1966 empezó a poner inyecciones, oficio que aprendió del señor Opinio Peña, trabajo que hizo con gran amor y humildad.
Es bueno resaltar que este trabajo lo realizó durante unos 20 años sin mirar el interés económico, si no con el interés de ayudar al mejoramiento de la salud de las personas.
Empezó a poner inyecciones a pie, luego en una bicicleta que le regaló su hermano Marino, más luego en un motor. Su labor empezaba todos los días después de las 6 de la tarde o sea luego de venir del trabajo. Fue tan bueno ese esfuerzo que llegó a ser recomendando por reconocidos médicos de Baní y de Santo Domingo, para poner inyecciones intravenenosas y sueros.
En la mayoría de las veces, no le cobraba a sus pacientes, y en algunos casos les regalaba inyecciones.
En el trabajo comunitario jugó un excelente papel, llegando a fundar y formar parte de las principales organizaciones de la comunidad, formó parte del comité de padres y amigos de la escuela de la comunidad en la cual tuvo una gran participación como directivo, fue directivo de la Sociedad Progresista de Villa Sombrero (SOPROVIS), fue fundador de los gremios de disfunción 1, 2, 3 Inmaculada Concepción siendo tesorero desde su fundación; a esta organización le dedicó gran parte de su vida. Fue presidente del comité Pro-Parque de Villa Sombrero, tesorero del comité de Cantores de Chuines, miembro del Patronato de Salud, del Patronato del Cementerio, directivo del Consejo de Administración del Acueducto Rural de Villa Sombrero CADARVIS, miembro de la Iglesia Católica etc.
Durante el huracán David refugió en su casa a 64 personas y trabajó gratuitamente en la reconstrucción de más de quince viviendas.
Por su gran labor comunitaria, fue reconocido como uno de los hombres de mayor confianza y respeto dentro de esta comunidad de Villa Sombrero.
Últimos comentarios